El segundo día de tu viaje a Florencia empieza con una visita a los Jardines de Boboli, uno de los parques más bonitos y extensos de la ciudad. Ubicados detrás del Palacio Pitti, estos jardines son un oasis de naturaleza y arte en el centro de Florencia.

Los Jardines de Boboli se crearon en el siglo XVI por encargo de los Médici, la poderosa familia que gobernó Florencia durante siglos. Los jardines se diseñaron siguiendo el estilo renacentista, con fuentes, estatuas, grutas y terrazas. Los jardines se ampliaron y embellecieron con el paso del tiempo, incorporando elementos barrocos y neoclásicos.

Son un lugar que te invita a disfrutar de la naturaleza y el arte en el centro de Florencia. Los jardines tienen una superficie de 45 hectáreas y cuentan con varios elementos que los hacen únicos y sorprendentes. Uno de ellos es el Anfiteatro, una gran plaza ovalada rodeada por una columnata y decorada con esculturas antiguas. Aquí se celebraban espectáculos y fiestas para la corte.

Además de este elemento, los jardines también tienen un estanque, una cascada, un laberinto, un jardín botánico y varias grutas artificiales. La más famosa es la Gruta del Buontalenti, que alberga un grupo escultórico que representa el Rapto de las Sabinas. También podrás ver varias fuentes, como la Fuente de Neptuno o la Fuente del Océano.

Los Jardines de Boboli son el sitio ideal para relajarse, hacer un picnic, leer un libro o simplemente disfrutar del paisaje y la naturaleza de Florencia. Es una excelente forma de comenzar un día de itinerario que cuenta con muchas más sorpresas y lugares interesantes.

Al comprar este tour por Florencia, vas a acceder a un secreto sorprendente de los Jardines de Boboli que tiene que ver con la historia del arte y con una obra famosa.

Luego de explorar los Jardines de Boboli, te sugiero que te dirijas al Palacio Pitti, uno de los palacios más destacados y magníficos de Florencia. Este impresionante palacio está situado junto a los jardines, en la Plaza de Pitti.

El Palacio Pitti fue construido en el siglo XV por la familia Pitti, una familia de banqueros rivales de los Médici. El palacio tiene un aspecto imponente y sobrio, con una fachada de piedra y grandes ventanas. El palacio fue comprado en 1549 por Leonor de Toledo, la esposa de Cosme I de Médici, que lo convirtió en la residencia oficial de los Grandes Duques de Toscana.

Fue ampliado y decorado con el paso del tiempo, albergando a diferentes dinastías que gobernaron Florencia, como los Médici, los Lorena y los Saboya. El palacio también fue usado como residencia por Napoleón Bonaparte y por el rey Víctor Manuel II de Italia.

El Palacio Pitti es un lugar que te hará viajar por la historia y el arte de Florencia. El palacio alberga varios museos que exhiben colecciones de pintura, escultura, porcelana, joyas y vestidos. Entre los museos que podrás visitar se encuentran:

- La Galería Palatina: un museo que contiene obras maestras del Renacimiento y del Barroco, como las de Rafael, Tiziano, Rubens o Caravaggio.

- Los Apartamentos Reales: un museo que muestra las habitaciones donde vivieron los Grandes Duques y sus invitados ilustres, decoradas con muebles, tapices y frescos.

- El Tesoro de los Grandes Duques: un museo que exhibe objetos preciosos que pertenecieron a los gobernantes de Florencia, como joyas, medallas, relojes o camafeos.

- La Galería de Arte Moderno: un museo que presenta obras de arte desde el siglo XVIII hasta el siglo XX, como las de Canova, Hayez o Fattori.

- La Galería del Traje: un museo que muestra la evolución de la moda desde el siglo XVI hasta el siglo XXI, con vestidos históricos y contemporáneos.

Puedes acceder al sitio web oficial del palacio para mayor información: Palacio Pitti.

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Seguidamente en tu segundo día en Florencia, te sugiero que subas al Piazzale Michelangelo, el mirador más famoso y hermoso de la ciudad. El Piazzale Michelangelo se encuentra en lo alto de una colina al sur del río Arno, a unos 30 minutos a pie del Palacio Pitti.

El Piazzale Michelangelo fue creado en 1869 por el arquitecto Giuseppe Poggi como parte del proyecto urbanístico que transformó Florencia en capital de Italia. El Poggi diseñó una gran plaza circular rodeada por una columnata neoclásica y decorada con copias en bronce de algunas obras de Miguel Ángel.

Es el sitio ideal para admirar Florencia desde las alturas. Desde aquí podrás ver el centro histórico de la ciudad con sus monumentos más emblemáticos, como el Duomo, el Palazzo Vecchio o el Ponte Vecchio. También podrás apreciar las colinas que rodean la ciudad con sus villas y sus iglesias.

El Piazzale Michelangelo es un lugar mágico que te regalará unas vistas inolvidables. Es especialmente recomendable visitarlo al atardecer, cuando el sol tiñe de rojo el cielo y los edificios de Florencia. En el Piazzale Michelangelo también encontrarás un restaurante y una cafetería donde podrás tomar algo mientras disfrutas del paisaje.

Así que, después de visitar el Palacio Pitti y sus museos, no te pierdas la oportunidad de subir al Piazzale Michelangelo y contemplar la belleza de Florencia desde una perspectiva única. Es una forma perfecta de concluir tu segundo día en la ciudad del Renacimiento.

Para culminar tu segundo día en Florencia, te invito a disfrutar de una cena en el restaurante La Giostra, uno de los lugares más románticos y elegantes de la ciudad. Este restaurante se encuentra en el corazón del centro histórico de Florencia, en las proximidades del Palacio Pitti y el Piazzale Michelangelo.

El restaurante La Giostra es un lugar que te hará sentir como en un cuento de hadas. El restaurante ocupa un antiguo establo del siglo XVI, que ha sido restaurado y decorado con un estilo rústico y acogedor. El restaurante tiene una iluminación tenue y está adornado con velas, flores y objetos antiguos. El restaurante también tiene una cocina abierta, donde podrás ver a los chefs preparar los platos.

Te ofrece una cocina toscana, refinada y creativa, elaborada con productos locales y de temporada. Entre los platos que podrás probar se encuentran el risotto con trufa negra, el solomillo de ternera con salsa de vino tinto, el cordero asado con hierbas o el pescado fresco del día. El restaurante también tiene una carta de vinos locales e internacionales que podrás maridar con tu comida.

Termina tu cena en el restaurante La Giostra con un postre típico de la Toscana, como el tiramisú, el cantucci con vin santo o la panna cotta. El restaurante también tiene una tienda donde podrás comprar productos regionales como aceite de oliva, queso o miel.

El restaurante está abierto todos los días, de 12:00 a 15:00 horas y de 19:00 a 23:00 horas. La reserva es obligatoria y se puede hacer por teléfono o por correo electrónico. 

Si quieres saber más sobre este restaurante, puedes visitar su página web oficial: La Giostra